Pablo Córdova estuvo 40 horas bajo los escombros del hotel que administraba tras el terremoto que azotó Ecuador. Su esposa lo dio por muerto y compró ataúd.
Familiares de David Morales Colón (22) cumplieron así su última voluntad. El inusual velatorio movilizó a muchos curiosos al barrio Hato Rey.